Cómo perder peso y mantenerte en línea

Perder peso suele estar entre los objetivos principales que tienen numerosas personas, sobre todo al llegar la temporada de verano y el buen tiempo.

Sin embargo, la verdad es que al margen de las dietas extremas que buscan ayudar a bajar de peso en poco tiempo, lo más recomendable es mantener una alimentación equilibrada y saludable, además de implementar ciertos consejos básicos para mantener la línea.

Teniendo esto en cuenta, aquí queremos hablarte sobre cómo perder peso y mantenerte en línea de forma sencilla y eficaz.

Índice

Consejos para bajar de peso y lograr mantenerte en línea

Si deseas poder perder algunos kilos y permanecer en tu línea, pero no sabes bien cómo hacerlo sin recurrir a dietas que al final no ofrecen los mejores resultados, lo mejor es que intentes poner en práctica los siguientes consejos:

Come 5 veces diarias

Es recomendable que trates de consumir 5 comidas diarias, las 3 principales (desayuno, almuerzo y cena), y 2 secundarias (a media mañana y a la hora de la merienda), así evitarás tener demasiada hambre al llegar la hora de la comida y de la cena, al mismo tiempo que podrás prevenir los atracones.

Igualmente, podrás mantener constante tu nivel de azúcar en la sangre, evitando así los excesivos cambios en los niveles de insulina que promueven el incremento de peso.

Consume mucha agua

Lo primero que deberías hacer si deseas poder mantener la línea y bajar de peso, sin duda, es tomar bastante agua cada día, ya sea natural o con gas, consumiendo alrededor de 2 lts. diarios.

Al consumir agua, de cierto modo lograrás mantener engañado al estómago al sentir hambre y al mismo tiempo, te ayudará a optimizar el metabolismo con respecto a las grasas, a la vez que drena el exceso de líquidos y purifica el organismo.

En caso de que no te agrade beber agua sola, siempre tienes la opción de sazonarla agregándole, por ejemplo, el zumo de un limón o una naranja, entre otras cosas.

Consume verduras y frutas

Comer unas 2-3 frutas diarias (alrededor de 400 g), de preferencia con la piel, se encuentra entre las mejores claves para lograr bajar de peso y mantener la línea con facilidad, y es que la fibra que se encuentra en la piel cuenta con una elevada capacidad saciante.

Es importante entonces que evites sustituir el consumo de fruta con la ingesta de zumos, independientemente si no tienen azúcar agregada, ya que en realidad poseen un reducido porcentaje de fruta y no ofrecen suficiente sensación de saciedad.

De la misma forma, es preciso que por lo menos consumas 2 porciones de verduras diarias (cocidas o crudas) en la comida y la cena.

Al igual que las frutas, las verduras ofrecen un aporte de minerales, fibra, sales y vitaminas, que son esenciales para garantizar el bienestar intestinal y que además, ayudan a mantener fácilmente la línea.

Reduce o elimina el consumo de sal

La sal promueve el ingreso de los lípidos dentro de las células adiposas del organismo, siendo esa la razón por la cual su consumo favorece el aumento del porcentaje de grasa en el cuerpo.

Por lo que además de eliminar o reducir su ingesta, puede ser aconsejable que la reemplaces utilizando hierbas y especias a la hora de sazonar tus alimentos.

Limita el consumo de edulcorantes sintéticos y de la fructosa

De acuerdo con diversas investigaciones, los edulcorantes sintéticos suelen enviar al organismo señales que no solo lo obligan a buscar otras fuentes de azúcar, sino que además alteran el metabolismo con relación a la glucosa y en consecuencia, favorecen el incremento de peso.

Por su parte, la fructosa promueve la acumulación de triglicéridos alrededor de la zona abdominal, lo cual se traduce no solo en grasa corporal, sino también en un claro aumento de peso.

Aprende a comer lentamente y masticar

Además de realizar 5 comidas diarias, para perder peso y lograr mantenerte en línea, resulta fundamental que te asegures de aprender a comer lentamente y también a masticar bien cada bocado, de modo que al tragar no quede casi nada de lo que masticaste.

Ten en cuenta que al momento de la masticación, suelen activarse ciertas señales que pasan directamente al centro del hambre, al mismo tiempo que llegan a la sangre mientras los nutrientes se van absorbiendo.

Por lo que al comer con mucha rapidez, existe el riesgo de que termines consumiendo una mayor cantidad de alimentos de la que en realidad necesita tu organismo, de modo que lo mejor es que intentes siempre hacerlo con lentitud.

Duerme el tiempo suficiente

Lo recomendable para las personas adultas suele ser dormir entre 7-9 horas durante la noche; y aunque no todos lo saben, el cansancio podría terminar influyendo sobre el peso de diversas formas:

Podrían tener una mayor tendencia a tomar malas decisiones (por ejemplo, consumir alimentos poco saludables en lugar de algo sano), podrías optar por conseguir en la madrugada un refrigerio que tenga muchas calorías, tendrás mayores antojos de comida chatarra y además, no tendrás ánimos de ejercitarte.

Busca oportunidades para estar siempre en movimiento

No basta con acudir 30 minutos al gimnasio o incluso a la piscina, sino que lo ideal es que intentes mantener cada día un estilo de vida más activo; en este sentido, puedes optar por salir a caminar, pasear en bicicleta, o incluso simplemente subir las escaleras, etc.